La UE se compromete a reducir en un 20% la emisión de gases de efecto invernadero para el 2020
Reunión del Consejo de los Jefes de Estado europeos
Bruselas, 9/3/2007, (Ecoestrategia).- Hoy en Bruselas se ha tomado la decisión mas importante desde la adopción del Protocolo de Kioto. Los líderes de la Unión Euroea (UE) han impulsado la lucha contra el cambio climático, decidiendo que debería haber una reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero del 30% para 2020 en la región.
El intento del presidente francés Jacques Chirac de apoyar el objetivo de las renovables promocionando la energía nuclear ha fracasado finalmente. Entre tanto, el presidente español, José Luis Rodríguez Zapatero, ha mantenido su apoyo decidido al objetivo europeo sobre las renovables.
Los Jefes de Estado y de Gobierno de la UE, reunidos hoy en Bruselas, han respaldado una ambiciosa reducción colectiva de las emisiones de gases de efecto invernadero en los 27 países miembros de la Unión Europea de un 30% para 2020 comparado con los niveles de 1990. Sin embargo, aunque han reconocido que una reducción del 30% es necesaria para combatir el cambio climático, el compromiso se ha limitado a lograr una reducción del 20% de modo unilateral.
El objetivo de la reducción de emisiones de un 30% es consecuente con el objetivo de la UE de mantener el aumento global de la temperatura por debajo de 2 grados centígrados y, por lo tanto, de proteger las regiones más vulnerables de los peores impactos del cambio climático.
Objetivo sobre las energías renovables
La Cumbre también acordó aumentar obligatoriamente el porcentaje de las energías renovables en los países de la UE en un 20% para 2020, haciendo patente su firme decisión de desarrollar las tecnologías energéticas disponibles más limpias y más seguras.
Aunque la Cumbre ha adoptado un objetivo mínimo de 10% para los biocombustible en el transporte, es necesario definir las garantías que aseguren que estos combustibles se obtienen de un modo ecológico y socialmente responsable.
El Primer Ministro inglés, Tony Blair se felicitó también de que la política energética, un asunto que Londres situó tanto en la agenda europea cuando ejerció la presidencia de turno de la UE en 2005 como en la del G8, haya salido adelante en una cumbre que no dudó en calificar de “histórica”.
“Es un programa vinculante y ambicioso al que los ciudadanos europeos darán la bienvenida”, resaltó el primer ministro británico al término del consejo europeo de primavera celebrado en Bruselas.
Blair puso el acento en los aspectos de liberalización del mercado energético, apoyado por el Reino Unido para lograr una mayor apertura y pasó luego a glosar los principales objetivos que se han marcado los Veintisiete para combatir el cambio climático.
Así, recordó el compromiso para reducir en un 20% las emisiones responsables del efecto invernadero y aumentar este porcentaje hasta el 30% si se logra un acuerdo internacional en la cita del G8 en Alemania.
“Si podemos tener un acuerdo internacional, y creo que la cumbre del G8 en Alemania es la oportundidad para tratar tener el marco de un nuevo acuerdo internacional en Cambio climático, entonces la ambición europea llegará hasta el 30%”, ilustró.
Ecologistas aplauden decisión pero exigen cumplimiento
Organizaciones como Greenpeace y el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) aplaudieron a la UE por esta resolución y por la decisión de un acuerdo conjunto sobre energías renovables para Europa. Sin embargo, advirtieron que se debe establecer leyes adecuadas para que se cumplan realmente los objetivos.
“Felicitamos a los líderes de la UE por situar la lucha contra el cambio climático en lo más alto de la agenda política y por recomendar una reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero para Europa del 30% para 2020. Pero es una pena que ellos no se comprometan hoy con este objetivo, y fijen un 20% de reducción como objetivo obligatorio”, dijo Raquel Montón, responsable de la campaña de Cambio Climático de Greenpeace.
Según WWF/Adena, el compromiso de los líderes europeos de realizar un mayor esfuerzo para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero hasta el 30% para 2020 marca el rumbo correcto para controlar el cambio climático. No obstante, la Unión Europea debe establecer las leyes y medidas adecuadas para que se cumplan realmente los objetivos.
Stephan Singer, Director de la Unidad Europea de Cambio Climático y Energía de WWF/Adena, puntualizó: “œResulta claro que las metas de reducción decidida hoy solo se alcanzará con leyes, medidas e incentivos fuertes. Las metas deben traducirse en una reorientación de inversiones hacia las tecnologías verdes, en lugar de hacia la energía nuclear”.
A pesar de la resistencia de Francia y Polonia, El Consejo Europeo acordó también un objetivo legalmente vinculante del 20% de energía procedente de fuentes renovables y de un 10% de biocarburantes certificados ambientalmente para 2020. WWF/Adena felicita a la UE por estas metas.
Los jefes de estado y gobierno de la UE acordaron una reducción de emisiones de gases de efecto invernadero del 30% para 2020 si otros países industrializados también toman medidas.